Hace días vengo observando que los relojes termómetro de nuestro Madrid están apagados, sin datos; pero, ¡asombroso!, algunos incluso han desaparecido. Me pregunto si a esta Corporación le interesa más hacer desaparecer algo que cumple una función, buena función, que, por ejemplo, los baches de aceras y calzadas, multitud en nuestro Madrid. Acabo de pasar por la calle de Fuencarral -¿es céntrica la calle de Fuencarral?- y es un puro bache desde hace días y, a lo que se ve, esto no les molesta a nuestros "directivos municipales".
Señor alcalde, le pido que, en vez de ir en automóvil con cristales opacos, blindado, acorazado, conducido y tantas lindezas con fondos de todos nosotros, lo haga a pie, quizá así vea con nitidez la maravillosa ciudad que usted nos tiene en aceras con baches, higiene cero y seguridad inexistente.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de diciembre de 2003