Los secretarios generales del PP y del PSOE, Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero, respectivamente, participaron ayer, por separado, en la multitudinaria manifestación convocada por ¡Basta Ya! en San Sebastián en contra del plan Ibarretxe y abogaron por la "libertad y la convivencia". El dirigente popular acusó a los nacionalistas de pactar con ETA, y el líder socialista exigió al lehendakari que retire su propuesta soberanista y "vuelva a la senda del Estatuto". A la marcha acudieron también cuatro ministros, mientras que el alcalde donostiarra, Odón Elorza (PSE), no asistió.
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Al observar la multitud que respondió a la convocatoria de ¡Basta Ya!, Rajoy pidió a Ibarretxe que "tome nota" y haga "una reflexión", si bien reconoció tener "la firme convicción" de que eso no ocurrirá porque, a su juicio, "los nacionalistas han pactado con ETA y quienes les apoyan".
Zapatero, por su parte, enunció tres razones para explicar su presencia en la movilización. Primero, por "solidaridad y apoyo a los amenazados"; segundo, porque el País Vasco "necesita apostar por la convivencia y la razón, por la Constitución y el Estatuto". Y, finalmente, recalcó su "rechazo al plan Ibarretxe". El líder socialista exigió a Ibarretxe la retirada de su propuesta y que "vuelva por la senda del Estatuto".
El líder del PP anunció por la mañana, en una rueda de prensa en el Congreso, que iba a proponerle esa misma tarde al líder socialista que los responsables de organización de sus partidos planteen al Comité de Regiones de la Unión Europea su rechazo al plan Ibarretxe, informa Soledad Alcaide. Rajoy aseguró que ya cuenta con el apoyo de las comunidades donde gobierna el PP y dijo que le gustaría contar también con "todas" las gobernadas por el PSOE. "No renunciamos a hacerlo en el Consejo Europeo, pero es un tema claro del Comité de Regiones", argumentó. Por la tarde, en San Sebastián, Zapatero manifestó a los periodistas que la propuesta de Rajoy "llega un poco tarde". Rajoy y Zapatero no marcharon juntos en la manifestación.
Horas antes, el líder del PSOE asistió a la reinauguración de la Casa del Pueblo de Rentería (Guipúzcoa), atacada por los violentos en 27 ocasiones. Allí se mostró convencido de que la paz llegará al País Vasco con la Constitución y el Estatuto vigentes.
El plan Ibarretxe fue el blanco de las críticas de los dirigentes que participaron en la marcha de San Sebastián. El vicepresidente segundo del Gobierno, Rodrigo Rato, y los ministros Ángel Acebes (Interior), José María Michavila (Justicia) y Eduardo Zaplana (Trabajo) descalificaron la iniciativa soberanista porque genera enfrentamiento en la sociedad vasca.
El alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, no acudió a la manifestación. En declaraciones a la cadena Cope manifestó que "las cosas no se resuelven en la calle, sino desde el encuentro y el diálogo".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 14 de diciembre de 2003