Miembros del colectivo antitrasvase se concentraron ayer ante el Parlament de Catalunya para dar su apoyo al tripartito de izquierdas que gobernará la Generalitat, y para ello emplearon un elemento bien conocido en el Delta: el arroz. Con varios kilos de este cereal, los antitrasvase dibujaron su logotipo en el suelo mientras en el interior se celebraba la primera jornada del debate de investidura de Pasqual Maragall como presidente de la Generalitat. Los antitrasvase quisieron, de esta forma, mostrar su confianza en el nuevo Ejectutivo, del que esperan halle la forma para paralizar el polémico trasvase del Ebro, eje del Plan Hidrológico Nacional. Joan Saura, de Iniciativa per Catalunya, les confirmó que el nuevo Gobierno mostrará claramente su rechazo al trasvase.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 16 de diciembre de 2003