El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, rechazó ayer las acusaciones vertidas por los dirigentes del PP de que el futuro Gobierno tripartito de Cataluña, con Pasqual Maragall en su cabeza, pone en cuestión la solidaridad entre las autonomías españolas y aseguró que "el principio de solidaridad y de cohesión interterritorial está asegurado con un socialista presidiendo Cataluña y un socialista presidiendo España". En declaraciones a Tele 5, el líder de la oposición acusó asimismo al Gobierno central de lanzar una "insidia intolerable" al haber planteado su portavoz, Eduardo Zaplana, que el PSOE ha recurrido al Tribunal Constitucional contra la improvisada reforma del Código Penal que pena la convocatoria ilegal de referendos (como el que propugna el plan Ibarretxe) porque el acuerdo de Gobierno en Cataluña también incluye la posibilidad de un referéndum (textualmente una "consulta general").
Pese a las quejas del PSOE, el vicepresidente segundo del Gobierno, Javier Arenas, mantuvo ayer vivo el ataque contra el nuevo Ejecutivo catalán y vaticinó que el tripartito de Maragall presentará un proyecto de gobernabilidad ahora y otro tras los comicios generales de marzo para que no pueda afectar a la campaña electoral de Zapatero, informa Luis R. Aizpeolea. Arenas dijo para argumentar su acusación, en una rueda de prensa en el Senado, que, en estos momentos, "hay muchos silencios ante muchas preguntas" sobre el programa del tripartito catalán.
Además, respaldó a Zaplana, quien el viernes se apresuró a afirmar que el programa del Ejecutivo catalán tiene "elementos clarísimos de inconstitucionalidad". Arenas dijo que "no hay que ser muy avispados para saber que una reforma del Estatuto, condicionada por el independentismo de Esquerra Republicana, va a estar fuera de la Constitución".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 16 de diciembre de 2003