Los profesionales sanitarios andaluces seguimos caminando entre la perplejidad y la resignada impotencia del que poco o nada puede cambiar mientras, según nuestros gestores, vivimos en el mejor de los mundos posibles. A la extrema dificultad para poner de acuerdo a los especialistas y a los médicos de Atención Primaria para coordinarse en beneficio de los pacientes le llaman "Gestión por procesos". La reiterada incompetencia demostrada para incentivar a los profesionales se denomina "Unidades de Gestión Clínica". Las unidades de "Atención Profesional" se crean para recoger la creciente indignación de los trabajadores, mal defendidos sindicalmente, mientras las autoridades se toman a pitorreo las directivas europeas que obligan a una jornada laboral digna, con sus descansos correspondientes y su remuneración adecuada. ¿Saben acaso los ciudadanos que el médico que le atiende puede llevar 32 horas ininterrumpidas de trabajo, debiendo tomar decisiones que pueden tener implicaciones importantes en su salud? ¿Qué pasó con los cerca de 200 millones de euros que se iban a invertir en el año en curso para contratar al personal que permitiera aplicar la normativa europea en jornada laboral? Los profesionales empezamos a estar hastiados de esta administración apoltronada que, para colmo, no tiene alternativa. Al menos que sepan que cada vez son más los profesionales que, buscando un trabajo en condiciones más dignas y mejor remunerado, emigran a otros países de la Unión Europea.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 17 de diciembre de 2003