Es bien sabido en el barrio de Aravaca nuestro permanente disgusto por los servicios que nos presta el Ayuntamiento de Madrid, al que pertenecemos (en concreto, al distrito de Moncloa-Aravaca, del que nos separan más de 10 kilómetros).
En la última reforma de la carretera de Castilla se dejó una única salida a la carretera de A Coruña, por la Clínica de la Moncloa, con sus correspondientes atascos, que sufrimos cada día.
Pues bien, ahora han batido su propio récord: desde el pasado 17 de diciembre del año pasado, esa única salida está cerrada por obras, obligando a todo el mundo (incluido el transporte público) a dar un enorme rodeo por la colonia de Valdemarín. Y ni siquiera están trabajando 24 horas al día.
En fin, seguimos envidiando a los vecinos de la localidad de Pozuelo de Alarcón, cuyas instalaciones están al lado de nuestras casas pero que no podemos usar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 17 de diciembre de 2003