El Eibar se clasificó para los octavos de final de la Copa del Rey gracias a su mayor acierto en el lanzamiento de la tanda de penaltis, imponiéndose por 3-2 tras haber concluido sin goles tanto el tiempo reglamentado como los treinta minutos suplementarios. Los guipuzcoanos vieron recompensados, de esa forma, sus méritos frente a un rival de superior categoría que, sin embargo, no fue mejor a lo largo del partido.
EIBAR 0-RACING 0
Eibar: Basauri; Edu Roldán, Alaña, Kepa Zarraga, Lambea; Uriz (m. 93, Burgueña), Óscar Pérez, Corredoira, Romero (m. 68, Aitor), Llorente; y Saizar (m. 100, Jon Kortina).
Racing:Aouate; Coromina, Moratón, Juanma, Neru; Nafti, Matabuena, Pablo Lago (m. 78, Benayoun), Txiki (m. 60, Regueiro), Jonatan; y Javi Guerrero (m. 68, Bodipo).
Árbitro: Undiano Mallenco. Amonestó a Óscar Pérez, Coromina, Neru, Juanma y Matabuena.
2.400 espectadores en Ipurúa. El Eibar se impuso en los penaltis por 3-2. Por parte local marcaron Alaña, Corredoira y Lambea, lanzó fuera Oscar Pérez y el tiro de Llorente lo paró Aouita. Por el Racing marcaron Regueiro y Jonatan. Basauri paró el tiro de Nafti, y Benayoun y Bodipo fallaron.
Aunque José María Amorrortu tan sólo alineó a un jugador que había sido titular en el encuentro anterior, su guardameta Garikoitz Basauri, el equipo armero plantó cara al cuadro de Lucas Alcaraz, que hubo de seguir desde la grada el encuentro, al estar sancionado. Siempre dentro del gran equilibrio de fuerzas que presidió el choque, el Eibar fue quien, arropado por su público, parecía querer hacer más, y en sus botas estuvieron las mejores oportunidades durante la primera mitad. Primero fue Corredoira, quien obligó a realizar una gran intervención al meta israelí Aouate, y más tarde el colegiado sacaba fuera del área lo que pareció un claro penalti de Juanma sobre Saizar, que además podría haberle costado la expulsión al futbolista cántabro.
Por su parte, el Racing intentaba contragolpear sin éxito, porque sus escasas llegadas carecían de acierto en el disparo, y no fue hasta el minuto 45 cuando bordeó el gol en un disparo de Javi Guerrero que salió ligeramente desviado. En la segunda mitad se incrementó el ritmo del partido y Pablo Lago tuvo en su cabeza el gol, en la acción más clara de los visitantes, pero el Eibar llegaba más al portal de Aouate y Llorente erraba un claro disparo en el interior del área, mientras que Matabuena sacó como pudo un balón lanzado desde la esquina que buscaba la red.
Ya en la prórroga, tras un gol anulado a Bodipo por previo fuera de juego, Jonatan tuvo en un mano a mano con Basauri la oportunidad de resolver la eliminatoria, pero el guardameta despejó su disparo con los pies. La última oportunidad del partido la tuvo el local Óscar Pérez, aunque Aouate voló para desviar a córner y llevar el partido a la definición desde el punto de penalti, donde el error en el lanzamiento definitivo a cargo de Bodipo propició la celebrada victoria del conjunto eibarrés.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 18 de diciembre de 2003