El secretario de Estado de Economía, José Folgado, lanzó ayer un sorprendente y duro ataque contra las compañías petroleras por la fuerte subida de los precios de los carburantes, especialmente el gasóleo de automoción, en los últimos días. En un lenguaje inusual -tradicionalmente, las llamadas de atención a las empresas las realiza de manera muy medida la directora de Energía, Carmen Becerril-, Folgado acusó a las petroleras de mantener un comportamiento "auténticamente irresponsable" al favorecer una evolución de precios que "no es presentable".
Según los datos de Economía, la semana pasada, el precio sin impuestos del gasóleo de automoción superó en 2,12 céntimos de euro por litro la media de la eurozona (30,67 céntimos en España frente a los 28,54 céntimos de la zona euro). La semana anterior, la diferencia era sólo de 0,96 céntimos. Esta semana, la distancia se mantiene en torno a los dos céntimos.
Ante esos datos, Economía, según fuentes del departamento, ha desenterrado el hacha de guerra contra las petroleras. Folgado explicó ayer que remitirá los datos de precios al Servicio de Defensa de la Competencia para que los investigue.
El anuncio fue cargado, además, con munición dialéctica de grueso calibre: "O somos más ineficientes" explicó Folgado en declaraciones a Efe "o es que hay algún tipo de acuerdo [entre las petroleras]". Para Economía, en cualquier caso, la evolución de los precios "se aleja de lo racional".
Fuerte malestar
El malestar del departamento que dirige Rodrigo Rato contra las petroleras, en especial contra Repsol YPF (45% del mercado), lo resumía ayer una fuente cercana a Folgado: "Es la guerra" aseguró. Folgado admitió que los mecanismos aprobados para aumentar la competencia (limitar las gasolineras de las petroleras y publicar los precios) "no están dando los resultados deseados".
Desde el sector petrolero fue tal la sorpresa por las declaraciones de Folgado que al principio nadie quiso decir nada oficialmente. Una vez repuestos, el secretario general de la Asociación de Operadores Petrolíferos de España (AOPE), Álvaro Mazarraza, se declaró extrañado por el "intervencionismo del Gobierno en un mercado completamente liberalizado".
El portavoz de la AOPE añadió que "cada compañía tiene su política de precio y que el mercado de carburantes en España funciona con normalidad, por lo que no cabe calificar a las petroleras de irresponsables, sino de todo lo contrario". "España es un país deficitario en gasóleo y su precio se ha incrementado en las últimas semanas por el fuerte tirón de la demanda", añadió Mazarraza. Por su parte, la Organización de Consumidores (OCU) responsabilizó a la Administración del incremento "no justificado" de los carburantes.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 18 de diciembre de 2003