En un duro golpe a la Administración Bush, un tribunal de apelación federal sentenció ayer que el Gobierno de Estados Unidos no puede encarcelar indefinidamente a los "enemigos combatientes", como se denomina a los capturados en la guerra de Afganistán y detenidos en la base naval estadounidense de Guantánamo, sita en el norte de Cuba.
El tribunal, que afirmó que las detenciones de Guantánamo son contrarias a los ideales de Estados Unidos, sostiene que los reos deben tener acceso a un abogado y al sistema de justicia norteamericano.
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Por dos votos a uno, el 9º Tribunal de Apelación sentenció que el encarcelamiento indefinido es inconsistente con la ley de EE UU y suscita serias preocupaciones ante las leyes internacionales. "Incluso en los tiempos de emergencia nacional (...) la obligación del sistema judicial es asegurar que sean preservados nuestros valores constitucionales e impedir que el Ejecutivo atropelle los derechos de sus ciudadanos y de otras personas", destaca la disposición del tribunal.
En una clara bofetada al Gobierno de George Bush añade: "Por casi dos años, Estados Unidos ha sometido a más de 600 de estos cautivos a una detención indefinida e incluso no les ha permitido ninguna posibilidad de hacer frente a su encarcelamiento, ni de protestar por no haber sido reconocidos como prisioneros de guerra, ni consultar con un consejero legal y ni tan siquiera apelar por un encarcelamiento equivocado o una identificación errónea".
Esta resolución fue emitida sólo horas después de que otro tribunal de apelaciones de EE UU dictaminase que la Casa Blanca no tiene autoridad para detener al ciudadano estadounidense José Padilla en su territorio como "enemigo combatiente", y ordenase que sea liberado en 30 días o transferido a la justicia civil. El dictamen indica que la detención de Padilla, acusado de pertenecer a Al Qaeda y recluido en un centro militar, no fue autorizada por el Congreso, y el Gobierno no puede declararle por tanto "enemigo combatiente". Padilla está encarcelado e incomunicado en una base militar de Carolina del Sur desde mayo de 2002.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de diciembre de 2003