El pleno de la Asamblea de Madrid quedó ayer suspendido varios minutos ante el desconcierto que creó el resultado de empate -55 diputados a favor y 55 en contra- en la votación de una proposición no de ley de IU en favor de los represaliados del franquismo. Todo se debió a una doble equivocación de la presidenta de la Cámara, Concepción Dancausa, y a que la presidenta del Gobierno autónomo, Esperanza Aguirre, estaba ausente del hemiciclo. El desempate requirió una tercera votación.
Dado que el PP tiene 57 diputados y la oposición (PSOE e IU) 54, el resultado de la votación asombró a los presentes, que dedujeron que algún miembro del grupo popular se había equivocado de tecla en la pulsación electrónica, por lo que se procedió a una segunda votación, que arrojó el mismo resultado.
Dancausa suspendió entonces la sesión para cambiar impresiones con los portavoces de los grupos parlamentarios, lo que fue aprovechado por Aguirre -ausente en las dos votaciones anteriores- para entrar en el hemiciclo y participar en la tercera. El portavoz del PP, Antonio Beteta, solicitó que esta votación se hiciera a mano alzada, mientras el color de las luces del panel que refleja la votación electrónica indicaba que había sido la propia Dancausa la que había votado erróneamente dos veces. La proposición no de ley de IU fue rechazada por 57 votos en contra y 55 a favor.
IU pretendía instar al Gobierno regional a desarrollar una "política integral de reconocimiento y acción protectora económica y social de los exiliados de la Guerra Civil, así como de los llamados niños de la guerra".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de diciembre de 2003