Joel Schumacher y Andrew Lloyd Webber hicieron un trato para resucitar un viejo proyecto: la adaptación al cine de El fantasma de la ópera, según la versión musical del compositor, que costará 80 millones de dólares. "Los actores debían ser jóvenes, sexy y, mejor, desconocidos. Ésa era mi condición. Andrew me exigió que pudieran cantar", señala el realizador neoyorquino. Tres candidatos superaron el examen. Gerard Butler, actor escocés y líder de una banda de rock, interpreta al fantasma que siembra el terror en la Ópera de París y busca los favores de la superestrella en ciernes, Christine. Emmy Rossum, de 17 años, hace de la nueva diva parisina. El triángulo lo completa Patrick Wilson, veterano en los musicales de Broadway.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 26 de diciembre de 2003