El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, José Bono, se ratificó ayer en la "tristeza" que le produce la "exhibición de los balances fiscales", en referencia a unas declaraciones de los presidentes de la Generalitat de Cataluña y de la Comunidad de Madrid, Pasqual Maragall y Esperanza Aguirre, respectivamente, en las que ambos aseguraron que sus comunidades son las que más dinero aportan por la vía de impuestos al resto de España.
Bono aseguró, tras mantener un encuentro con Aguirre, que "los balances fiscales pueden tener interés intelectual o académico, pero, si el balance fiscal de un territorio se exhibe para merecer más derechos que otro cuyo balance no está tan cargado de superávit, lo que se produce es una desagregación que no está amparada por la Constitución". En este sentido, el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha afirmó que "ser socialista significa creer en la solidaridad y la igualdad" y manifestó que "pagar más impuestos no da más derechos" porque de aceptar esta máxima, continuó, "acabaríamos en la ley de la selva". Bono aseguró que en su partido, el PSOE, "se piensa" y recomendó a los militantes "que se queden con el discurso que más les guste", en referencia a sus diferencias con Maragall.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 30 de diciembre de 2003