Un meteorito estalló en torno a las seis de la tarde de ayer sobre la península Ibérica. En distintos puntos de las provincias de A Coruña, León, Palencia, Madrid, Cuenca, Castellón, Valencia, Alicante y Albacete numerosos testigos aseguraron haber visto bolas de fuego, probablemente los restos incandescentes del estallido del bólido. El estruendo también fue oído en muchos lugares de España, desde la costa gallega hasta el litoral mediterráneo. Centros de emergencias de toda España recibieron cientos de llamadas de personas que alertaban sobre el fenómeno y pusieron en marcha dispositivos de rastreo.
El espectáculo empezó poco antes de la seis de la tarde. Miles de personas avistaron a partir de entonces en distintos puntos de España la caída de bolas de fuego, posiblemente originadas por la entrada en la atmósfera, y el consiguiente estallido, de un meteorito de gran tamaño. Las bolas de fuego cruzaron la península desde Santiago de Compostela a Castellón. Los centros de emergencias empezaron a recibir llamadas de gente que aseguraba haber visto caer del cielo "bolas de fuego" y "objetos incandescentes".
En la provincia de León, la lluvia de meteoritos fue divisada en varias zonas, incluso en la capital. En Renedo de Valderaduey, a unos 90 kilómetros de León, Manuel González, ganadero, vio cómo una "gran bola de fuego" se estrellaba en un pinar, a unos cuatro kilómetros de donde él estaba, sobre las 17.30 horas. "Se notó un estruendo, y luego vimos una estela de humo", relató Amaranto Macho, otro vecino de esa localidad, informa Marifé Moreno.
La Guardia Civil de la localidad leonesa de Almanza confirmó a Efe el impacto de un trozo de meteorito en el límite entre las provincias de León y Palencia, concretamente en las cercanías de Renedo de Valderaduey, al este de León, y de Guardo, al noroeste de Palencia. Los bomberos fueron movilizados ante la caída de un objeto extraño pero anoche no se había informado de que el fenómeno hubiese causado daños materiales ni personales.
Fuentes del instituto armado en Almanza (León) subrayaron la alta probabilidad de que se tratara de un meteorito tras haber descartado, previa comunicación con la base aérea de la Virgen del Camino -sede del aeropuerto civil de León-, la posibilidad de que lo ocurrido pudiera estar relacionado con el vuelo de algún avión.
Por su parte, el Instituto Nacional de Meteorología informó de que con los medios de que dispone, entre ellos radares e imágenes por satélite, no detectó "nada fuera de lo normal", y descartó que se trate de algún fenómeno atmosférico conocido.
Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) y la compañía Iberia aseguraron a Efe que no tenían constancia de que por la tarde se hubiera producido problema alguno en los vuelos a su cargo. Iberia no había recibido hasta las 20.00 horas ninguna notificación de sus pilotos sobre este fenómeno cósmico, según confirmó la aerolínea.
Centros de Emergencias de toda España recibieron a lo largo de la tarde cientos de llamadas de personas que alertaban de que se habían visto caer bolas de fuego en distintos puntos de Madrid, Albacete, Cuenca, Castellón, Valencia, Alicante, León, Palencia y A Coruña.
Una vecina de Palencia relató anoche a la Cadena SER lo que vio. Describió así lo que había observado: "Iba paseando por una acera con mi marido cuando pude ver un resplandor muy fuerte. Me dije, 'pero qué pronto han encendido hoy las farolas'. Pero miré al cielo y vi una cosa muy brillante, y una estela de luz y como de humo, y al rato oí un ruido como el de una traca muy fuerte".
El teléfono de emergencias de Madrid 112 recibió, también, una veintena de llamadas de distintos puntos de la región en las que los comunicantes aseguraban haber visto "objetos incandescentes" caer del cielo.
Uno de los ciudadanos que llamó a emergencias fue una mujer que circulaba con su coche por una carretera próxima a Las Rozas (Madrid). "He visto caer algo del cielo. Era como un avión ardiendo con una especie de estela", repetía Silvia al operario del 112 que le atendió; éste le respondía que no se preocupara y que habían recibido varias llamadas similares.
Esta mujer, como otros conductores, aparcó el coche para observar el fenómeno. "Nos miramos todos sorprendidos, porque no sabíamos que era lo que había ocurrido, aunque luego pensé que lo que había visto no podía ser un avión, porque era como una bola con una estela", aseguró en declaraciones a Efe.
Como "una estrella fugaz"
El periodista argentino Héctor Barrera, quien presenció el fenómeno en el estadio de San Lázaro de Santiago de Compostela, explicó que vio "un brillo en el cielo semejante a una estrella fugaz o un cometa, pero más lento". "En un principio pensamos que podía ser un accidente aéreo y nos preocupamos, pero no vimos ningún incendio ni nada", aseguró en declaraciones a Radio Marca.
El Centro de Coordinación de Emergencias de la Comunidad Valenciana organizó un dispositivo de búsqueda tras recibir la primera llamada de alerta, a las 17.50 horas, desde el puerto de Burriana (Castellón), informa Maria Fabra. Un particular alertó al servicio de emergencias de que estaba cayendo "algo" del cielo. Posteriormente, volvió a llamar al 112 avisando de nuevas caídas.
Efectivos de distintas policías locales, del Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón y de la Guardia Civil fueron movilizados ante el temor de que los restos pertenecieran a alguna aeronave. De entrada, comprobaron si había habido alguna denuncia de desaparición de una avioneta, ala delta o similar, pero nadie había realizado una denuncia en ese sentido.
La Policía Local realizó búsquedas en municipios como Nules, Vall d'Uixó, Betxí, Onda y Vilavella. Por su parte, efectivos de la Guardia Civil y el Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón también realizaron barridos en distintas zonas. No se localizaron restos de ninguna aeronave ni residuos de piedra, por lo que los efectivos abandonaron la búsqueda a las 20.30 horas.
Un testigo de excepción
El director del Observatorio Astronómico de Santiago de Compostela, José Ángel Docobo, quien vio el fenómeno, aseguró ayer que dado el tamaño del meteorito podría tener una masa de entre 50 y 100 toneladas.
El director del observatorio estaba presenciando, en el Multiusos de San Lázaro, un partido de segunda B entre el Compostela y el San Sebastián de los Reyes cuando observó el fenómeno. A juicio de Docobo, se trataba probablemente de "un bólido, una enorme piedra cósmica que se movía en torno al sol, se encontró con la atmósfera terrestre y con el rozamiento se fragmentó, provocando el efecto que se pudo ver".
Docobo destacó el hecho de que este fenómeno se haya visto de día, cuando habitualmente sólo se puede observar de noche, lo cual, en su opinión, indica que el objeto era "enorme", estalló y se fraccionó en meteoritos, informa Efe.
El experto comentó que el avistamiento de la bola de fuego, que tenía una inclinación de aproximadamente 30 grados sobre el horizonte, se produjo a las 17.47 horas en dirección Este, desde la posición en la que él se encontraba. Esto confirmaría la hipótesis de que la bola de luz podría haberse fragmentado sobre las zonas de León y Palencia, donde incluso llegaron a "temblar" los cristales de los ventanales en las viviendas del norte de la provincia.
Indicó que el hecho de que el objeto cósmico haya sido avistado en varios lugares de España facilitará a los expertos localizar el lugar exacto en poco tiempo y que además, al ser tan grande el bólido, éste podría haberse fragmentado en una zona de unos 100 kilómetros de extensión.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 5 de enero de 2004