El consejero de Enseñanza, Josep Bargalló, celebró ayer la primera reunión con algunos representantes de la escuela concertada en la que explicó la nueva política de matriculación. En un ambiente "cordial y positivo", según fuentes de Enseñanza, Bargalló se entrevistó con Francesc Riu, secretario general de la Fundación Escuela Cristiana de Cataluña, y Maria Dolors Bassols, presidenta de los Servicios Educativos de Cataluña, a quienes presentó las grandes líneas del nuevo decreto de matriculación y el proyecto de oficinas de escolarización. Así, el consejero desgranó los cambios de la nueva normativa de matriculación, que prevé aumentar el número de plazas de reserva destinada a la matrícula viva -la que incluye los alumnos que se van incorporando al curso cuando ya ha comenzado-, y que son mayoritariamente de procedencia inmigrante. Respecto a las nuevas oficinas municipales de matriculación, Bargalló ha señalado en diversas ocasiones que la medida pretende organizar la distribución del alumnado entre la red pública y la concertada.
Por otra parte, Enseñanza avanzará las pruebas de acceso a funcionario docente sin esperar la nueva normativa derivada de la LOCE. El departamento convocará 950 plazas este año para que los nuevos profesores puedan incorporarse al próximo curso.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 14 de enero de 2004