El Grupo Socialista solicitó ayer formalmente la convocatoria de un pleno extraordinario en las Cortes Valencianas por la vía excepcional del artículo 14.3 del Estatuto de Autonomía, que prevé que una quinta parte de los diputados pueda realizar la petición directamente. La decisión, justificada por los socialistas en la pasividad y la falta de voluntad del presidente de las Cortes para convocar a la Diputación Permanente -la representación del pleno en periodos en los que no hay actividad parlamentaria-, tiene como objetivo lograr la comparecencia del presidente de la Generalitat, Francisco Camps, para que explique la auditoría realizada por la Sindicatura de Comptes de las cuentas del Consell correspondientes a 2002.
Los socialistas consideran que el informe de la Sindicatura de Comptes "constata graves irregularidades en la gestión del gobierno del PP, así como una situación económica y financiera insostenible".
Los populares mostraron ayer su reticencia a convocar un pleno extraordinario y se escudaron en cuestiones de carácter reglamentario para intentar oponerse a la comparecencia de Francisco Camps en el Parlamento valenciano. Por su parte, el consejero de Economía, Gerardo Camps, defendió la gestión del PP.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de enero de 2004