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OPINIÓN DEL LECTOR

Avería, arcén, desamparo

El pasado día 5 de enero mi hijo sufrió una avería en el coche en plena M-30, permaneciendo en el arcén de la misma desde las tres de la tarde, hora en que avisó a su seguro para que enviaran una grúa hasta las cinco y cuarto en que llegó ésta y le remolcó el coche hasta un taller.

Durante las dos horas y cuarto que permanecimos en el arcén de la M-30, con el consiguiente peligro por la situación en que estábamos estacionados y el volumen de tráfico (unido a la velocidad con la que se conduce en esta vía), pasaron a nuestro lado varias patrullas de policía, tanto en coche como en moto, las cuales a la fuerza tuvieron que vernos (pues por el miedo a que un coche nos arrollara estuvimos en todo momento de pie y fuera del nuestro) y ninguno se dignó parar a preguntarnos qué había pasado y si necesitábamos sus servicios. (Podía haberse dado la circunstancia de que no lleváramos teléfono móvil).

¿Dónde está la ayuda al ciudadano que se supone debe prestar la policía? El Gobierno de la Comunidad de Madrid debería cambiar radicalmente la forma de actuación de este cuerpo que sufragamos con nuestros impuestos.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 20 de enero de 2004