La junta de portavoces del Parlament inició ayer los trámites para reformar el Estatut al aprobar, con la única abstención del Partido Popular, que el proceso se abordará a través de una ponencia conjunta. Hasta ahora existían dos propuestas para debatir la reforma estatutaria: una presentadas por los grupos de izquierda y la otra por Convergència i Unió (CiU).
La junta asignó su tramitación a la comisión parlamentaria de organización y administración de la Generalitat, presidida por el republicano Joan Ridao. En la reunión de ayer, también acordó aprovechar al máximo el mes de febrero y realizar tres plenos antes de las elecciones generales: serán los días 11, 18 y 25.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 21 de enero de 2004