El portavoz de Izquierda Unida en la Asamblea de Madrid, Fausto Fernández, calificó ayer de "auténtico pelotazo urbanístico" la intención de la empresa de automóviles Nissan de cerrar su fábrica de Cuatro Vientos (Latina) y trasladar su producción a Cataluña en el año 2006.
Tras reunirse, en compañía de los diputados Eduardo Cuenca y Marga Ferré, con el comité de empresa de la factoría, Fernández mostró su "enérgico rechazo" a esta operación y se comprometió a llevar al Parlamento regional las acciones legislativas necesarias para garantizar los 550 puestos de trabajo.
Según el portavoz de la coalición, el plan presentado por la dirección de la compañía no presenta "causas objetivas y razonables" que justifiquen el traslado, sino que, en realidad, esconde la intención de Nissan de "especular con los muchos metros cuadrados de suelo que tiene, que seguramente serán recalificados para hacer viviendas". "Hay 550 familias madrileñas cuya subsistencia depende directamente de estos puestos de trabajo y otras 1.200 que dependen indirectamente", explicó Fernández.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 22 de enero de 2004