El Banco Popular anunció ayer que cerró 2003 con un beneficio neto de 714,27 millones, un 12,8% más. El incremento fue posible por la subida del 30% en los créditos y de casi el 25% en recursos de clientes. "Ocupamos una firme posición como tercer banco", dijo Ángel Ron, consejero delegado, desdeñando a los bancos medianos, ya que "ganamos más que todos ellos juntos". La entidad presentó un plan hasta 2006, cuando quiere ganar 1.000 millones, un 40% más que en 2003.
El Popular ha decidido cambiar de estrategia y crecer con oficinas y compra de bancos. Ese crecimiento dejará la rentabilidad sobre recursos propios (ROE) en el 25%, por debajo del 25,6% actual. Antes nadie se hubiera atrevido a frenar la rentabilidad. "No hay nada malo en cambiar, cuando se cambia en la dirección adecuada", afirmó Ron, parafraseando a Churchill. Sin reconocer que criticaba a sus antecesores, Ron dijo que con el modelo de hace ocho o cinco años "no se podría ganar lo que ahora obtenemos con los tipos de interés al 2%". La integración de la filial lusa BNC ayudó a subir crédito y recursos aunque también incrementó los costes un 7,6%. El aumento en hipotecarios (+26,5%) y pymes (+18%) no afectó a la morosidad (0,83%). Ron reconoció que en la relación con la Mutua Madrileña Automovilista (4% del capital y aspiración al 5,5%) "han existido altibajos, pero la relación es buena".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 23 de enero de 2004