"La precariedad laboral es uno de los más graves problemas de los jóvenes", denunció ayer UGT-PV en un comunicado. El sindicato aseguró ayer que nueve de cada diez contratos suscritos el año pasado por jóvenes valencianos de entre 16 y 29 años fueron temporales. Una cifra superior a la registrada en el conjunto de España, donde el 73,1% de los contratos firmados por jóvenes fueron temporales. En ambos casos, recuerda el sindicato, la situación es diametralmente diferente a la europea, donde este porcentaje es del 36,6%.
El sindicato que dirige Rafael Recuenco recuerda que la precariedad condiciona la vida de los jóvenes, que "no logran obtener recursos estables para independizarse, ni pueden hacer planes de futuro". A la temporalidad -muy acusada ya que el 77% de este tipo de contratos tienen una duración media igual o menor a tres meses- se une el hecho de que los empleados temporales ganan un 48% menos que aquellos que disponen de un contrato fijo.
UGT-PV criticó ayer que en muchos casos los jóvenes "han de sufrir encadenamientos abusivos de contratos" hasta el punto, añade, que "en ocasiones se ven obligados a firmar más de quince contratos con la misma empresa en un solo año". Los falsos autónomos, los que trabajan para subcontratas y ETT o los becarios son situaciones mencionadas ayer por el sindicato. También recordó la relación directa entre la precariedad y la siniestralidad laboral. "La mayor parte de las personas que sufren accidentes laborales son jóvenes de entre 16 y 25 años, con un contrato inferior a seis meses y que en la mayoría de los casos trabaja en una empresa de menos de 50 trabajadores", aseguró UGT-PV.
Los jóvenes son uno de los colectivos con más dificultades en el mercado laboral. En la Comunidad Valenciana el 22,5% de los 207.100 parados tiene entre 16 y 25 años, según los últimos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). Un porcentaje, con todo, inferior a la media española, situada en el 23,73%.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 31 de enero de 2004