La imposibilidad actual de llegar a un acuerdo sobre la sede del reactor experimental de fusión ITER ha decidido a los socios del proyecto a retrasar la reunión prevista para este mes, tras el fracaso de la de nivel ministerial celebrada en diciembre pasado en Washington, informa la revista Nature. China, Rusia, Estados Unidos, la Unión Europea, Japón y Corea del Sur no logran ponerse de acuerdo sobre si el ITER debe construirse en Cadarache (Francia) o Rokkaisho-Mura (Japón) y no quieren arriesgarse a otro fracaso.
El pasado mes, Estados Unidos manifestó su apoyo claro a Japón, mientras que China hizo lo mismo con Francia. Si no cambian las posturas, sólo Rusia o Corea del Sur podrían inclinar la balanza, pero la decisión debe tomarse por consenso de los seis socios (Canadá se encuentra prácticamente fuera del proyecto).
El 21 de febrero se reunirán en Viena los negociadores de todos los países para intentar avanzar. Se han planteado acciones compensatorias para la sede perdedora que por ahora no han sido aceptadas, entre ellas que el centro de computación y de investigación del ITER se sitúe en ésta. Europa está, al parecer, dispuesta a financiar proyectos de investigación de diversas áreas en Corea del Sur y Japón si éstos apoyan a Francia.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 9 de febrero de 2004