Tres dirigentes de la Confederacion Intersindical Galega, CIG, entre ellos su secretario general, Suso Seixo, inciaron ayer una huelga de hambre en Lugo para protestar contra las condenas, de entre 3,5 y 6,5 años de cárcel, impuestas a los integrantes de un piquete informativo durante la huelga general del 19 de junio de 2002. Los sindicalistas condenados habían protagonizado diversos destrozos en un bar de la ciudad que se negaba a secundar la convocatoria de paro y se enfrentaron a golpes a los policías que trataron de sofocar los incidentes. La titular del juzgado de lo penal número 2 de Lugo, Rocío González, condenó al piquete por atentado a la autoridad y a los derechos de los trabajadores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de febrero de 2004