Un total de 11 personas, entre ellas cinco extranjeras, ha sido arrestada en Alicante por estafar 995.000 euros anuales a la Seguridad Social y 900.000 a la Agencia Tributaria mediante la creación de puestos de trabajo ficticios, según informó ayer la Comisaría de Alicante. Los inmigrantes están considerados como víctimas consentidas, toda vez que con el fraude obtenían la renovación del permiso de residencia.
El fraude fue supuestamente ideado por J. E. G., de 62 años, quien ofreció puestos de trabajo como vendedores en mercadillos y ferias, cuyos afiliados debían pagar 85 euros a la empresa, bajo el pretexto de que eran pagos a la Seguridad Social. Sin embargo, sólo se les daba de alta exclusivamente durante dos horas.
Posteriormente, el acusado decidió ofertar falsas ofertas de empleo a inmigrantes a cambio de 800 euros. La empresa tapadera comenzó a expedir estos contratos, que han llegado a cubrir 119 expedientes policiales con documentos falsos y que han sido detectados en la Inspección de Trabajo y en la Tesorería de la Delegación de Alicante, tras su presentación por más de 500 personas.
Asimismo, el acusado figura como jubilado, cuando en realidad trabaja como director de la cooperativa, según la Comisaría de Alicante.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 13 de febrero de 2004