Las operadoras de telefonía móvil estiman que el cobro mínimo del primer minuto no sólo es una práctica legal sino necesaria para el mantenimiento del servicio. Así lo van a plantear en la reunión que mantendrán hoy con los ministerios de Ciencia y Tecnología y de Sanidad y Consumo. Si se les obliga a cobrar por segundos, como pide el Defensor del Pueblo, advierten de que restablecerán la cuota de abono mensual.
Telefónica Móviles, Vodafone y Amena tienen una postura firme y unida en la práctica del redondeo (o franquicia, como prefieren denominarla las compañías) consistente en el cobro del primer minuto independientemente de la duración de la llamada. Las operadoras defienden que esa facturación mínima es necesaria para costear el mantenimiento de la red y la calidad de las comunicaciones y advierten de que si se eliminara legalmente el redondeo, deberían reintroducir la cuota de abono mensual, que fue eliminada (o reducida al mínimo) por los operadores en la primavera de 2002.
Esta postura será defendida por las compañías en la reunión que mantendrán hoy con representantes de los ministerios de Ciencia y Tecnología y de Sanidad y Consumo. En la cita se analizará el requerimiento del Defensor del Pueblo que abrió una investigación con el objeto de clarificar el sistema de facturación que aplican las compañías de telefonía móvil. La intención es que los usuarios paguen sólo por el tiempo que verdaderamente consumen.
La visión del Ministerio de Ciencia y Tecnología no discrepa mucho de la de las compañías. Defiende que, desde el punto de vista de la legislación en materia de telecomunicaciones, esta práctica es completamente legal, ya que las tarifas de la telefonía móvil están liberalizadas. Un criterio muy similar al de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) en su informe remitido al Defensor del Pueblo.
[La junta directiva de la patronal de telecomunicaciones Aniel dio ayer luz verde a su fusión con la patronal informática Sedisi].
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 19 de febrero de 2004