El delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, César Pascual, los sindicatos, los padres de alumnos y organizaciones que luchan contra la drogadicción coincidieron ayer en censurar que las escuelas realicen análisis de saliva a los alumnos para saber si se drogan, tal y como van a hacer pronto las del Reino Unido. César Pascual señaló que en España nunca se ha planteado implantar este tipo de medidas.
Los secretarios generales de las federaciones de enseñanza de CCOO y UGT, Fernando Lezcano y Jesús Ramón Copa, insistieron en que no es bueno introducir en la escuela un régimen policial. "El principio de inocencia se pervierte", dijo Lezcano. Copa añadió: "Se crearían más conflictos de los que se quieren arreglar". Para la presidenta de la confederación laica de padres de alumnos, Ceapa, Maite Pina, "las medidas pugnitivas tienen pocos resultados".
El presidente de la Unión de Asociaciones y Entidades de atención al Drogodependiente, Luciano Poyato, insistió en "crear un clima de confianza entre la escuela y el alumnado" y el director general de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, Ignacio Calderón, señaló que lo que hace falta es educar para prevenir.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 24 de febrero de 2004