La plataforma Salvem les Valls, opositora al túnel de Bracons, anunció ayer su pretensión de organizar protestas en la zona de obras del eje Vic-Olot antes de las próximas elecciones generales. Raül Valls, portavoz de la entidad, explicó que existe la firme voluntad de radicalizar la oposición si antes de las elecciones el Gobierno de la Generalitat no se decide a parar definitivamente las obras.
Valls no teme que el conflicto pueda acabar como el de la línea eléctrica de las Gavarres, en el que la infraestructura se acabó imponiendo con la intervención de los Mossos d'Esquadra. "No queremos tener ningún conflicto con los Mossos, aunque observamos que el consejero Nadal y su círculo parecen cada vez más partidarios de la razón de la fuerza que de la fuerza de la razón", argumentó. La entidad que encabeza la oposición a Bracons considera un error que la Generalitat haya decidido posponer la decisión sobre el eje hasta después de las elecciones del 14 de marzo. "Todo parece indicar que quieren evitar interferencias electorales", apuntó Valls.
La plataforma considera que las pérdidas derivadas de la paralización total de las obras, supuestamente de unos 24 millones de euros, no son significativas en comparación con los 260 millones de euros en que está presupuestada la inversión total. Las obras, detenidas en el túnel, continúan en un tramo de unos cinco kilómetros en las inmediaciones de Torelló (Osona). Mientras tanto, la Generalitat estudia informes técnicos y medioambientales para tomar una compleja decisión que consiga conciliar las diferentes sensibilidades sobre esta infraestructura que coexisten en el Gobierno.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 26 de febrero de 2004