Hoy [por ayer, 27 de febrero] los profesores de Enseñanza Religiosa de todos los centros educativos de la zona sur de Madrid no han acudido a clase. Las autoridades de la Iglesia católica impartieron ayer una orden de obligado cumplimiento por la cual deben asistir a un funeral en el Cerro de los Angeles por la muerte de un obispo. Una vez más los dineros públicos pasando por encima de cualquier consideración, de cualquier respeto a derechos individuales o colectivos de niños y adultos. Supongo que nuestras autoridades de la Comunidad de Madrid efectuarán el descuento económico correspondiente en las nóminas y que será la Iglesia quien abone el salario de este día dedicado a su mayor gloria y boato. ¡Y dirán que Almodóvar exagera al recordarnos nuestra mala educación!.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 28 de febrero de 2004