"Cualquier conducta que implique tráfico de drogas tiene que estar castigada con penas contundentes, incluyendo por supuesto las de cárcel. En la próxima legislatura me propongo llevar a cabo desde el Gobierno un esfuerzo de primer orden para dar la batalla con la mayor eficacia a los narcotraficantes. No encuentro ni una sola razón que pueda llegar a justificar la despenalización de cualquier actividad relacionada con el tráfico de drogas".
"Al mismo tiempo, tengo la convicción de que debemos anticiparnos al problema y evitar la caída de tantos jóvenes en la adicción a las drogas".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 29 de febrero de 2004