Los principales candidatos valencianos que concurren a las elecciones generales salieron ayer en defensa de los sectores productivos tradicionales. Los del Gobierno para asegurar que tienen un futuro brillante, los de la oposición para proponer medidas que mejoren su difícil situación. El candidato del PP por Valencia, Eduardo Zaplana, aseguró que los sectores productivos tienen por delante "inmejorables posibilidades de futuro. El ministro de Trabajo restó importancia al reciente informe de la Cámara de Comercio de Valencia que alerta de una situación de crisis estructural en este segmento de la economía y tachó el documento de teórico. Es decir que no tiene por qué tener conexión con la economía real.
Por su parte, el secretario de Economía del PSOE y candidato por Castellón, Jordi Sevilla, prometió la construcción de 7.500 viviendas protegidas en la provincia de Castellón; mientras que su homóloga en Valencia, Carmen Alborch, apostó en Alginet por medidas de apoyo a la renovación tecnológica y a las exportaciones si vence su partido en las próximas elecciones generales.
En Alicante, el coordinador de IU, Gaspar Llamazares, apeló al "voto libre y necesario" para hacer frente a las llamadas al "voto útil".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 2 de marzo de 2004