Los Mossos d'Esquadra interceptaron el pasado miércoles en el kilómetro 86 de la C-33, antigua autopista A-17, en La Llagosta (Vallès Oriental), a un motorista que circulaba a 230 kilómetros por hora, según informaron fuentes de la policía catalana.
La motocicleta, una Yamaha de 900 centímetros cúbicos que circulaba en sentido Barcelona, fue parada por los agentes en el peaje de la autopista C-33. Su conductor, de 31 años y vecino de El Prat (Baix Llobregat), fue denunciado por la policía autonómica catalana.
El Servicio Catalán de Tráfico señaló ayer que es una infracción considerada "muy grave" y que comporta la retirada del carnet durante tres meses además de una fuerte sanción económica.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 5 de marzo de 2004