Diversión y aprendizaje igual a cine y ciencia. Ahí están para atestiguarlo 400 películas con temas científicos como protagonistas o como elementos clave en la historia. Un vistazo a esta relación es la que ofrece José Manuel Serrano Cueto en De lo fantástico a lo real. Diccionario de la ciencia en el cine (Nivola). Páginas para adentrarse en un universo cinematográfico que ayudan a comprender aspectos de la física, la astronomía o la biología, de la medicina física y psíquica. Y a través de todos los géneros, en especial el de la ciencia-ficción.
"El cine tiene la responsabilidad de la buena o mala imagen que la calle tiene de la ciencia, y la única manera de que muchos se acerquen a lo científico sin prejuicios", dice Serrano Cueto. Una videoteca que incluye películas muy rigurosas y otras no tanto, pero que enseñan, sensibilizan o despiertan la imaginación del espectador de la mano de destacados directores y actores.
De ello dan fe títulos que abordan la medicina: Amarga victoria, de Edmund Gouling; Mi pie izquierdo, de Jim Sheridan; Un asunto de mujeres, de Claude Chabrol; El hombre elefante, de David Lynch, o Philadelphia, de Jonathan Demme. O la psicología y la psiquiatría: Las tres caras de Eva, de Nunnally, y El gabinete del doctor Caligari, de Robert Wiene. O la biología y tecnología: 2001: odisea del espacio, de Stanley Kubrick; las matemáticas: Cube, de Vicenzo Natali; la tecnología, Metrópolis, de Fritz Lang; la astronomía, Contact, de Robert Zemeckis. Además de biografías como las de Galileo, Da Vinci, Einstein o Madame Curie.
El diccionario presenta 400 películas y 20 series de televisión con su ficha técnica, el campo de la ciencia que abordan y una sinopsis analítica del argumento que sirve por igual a cinéfilos, profesores o público en general.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 5 de marzo de 2004