La eléctrica Iberdrola propondrá a la junta de accionistas que se celebrará a principios del mes que viene una modificación de los estatutos sociales que dificultará las ofertas públicas de adquisión (OPA) por debajo del 66% del capital de la sociedad. Según la compañía, la modificación de los estatutos trata de proteger a los pequeños accionistas ante operaciones especulativas.
Con este fin, los nuevos estatutos prevén que los accionistas que no quieran acudir a la hipotética oferta de compra cambien sus títulos por acciones sin voto o acciones rescatables al cabo de un periodo de tiempo. Esas acciones asegurarán a sus titulares una rentabilidad mínima que mejorará cuanto peores sean las condiciones de la oferta rechazada.
Iberdrola, con un 85% de su capital flotante (en Bolsa), elimina por el contrario todos los blindajes (limitaciones de voto) en el caso de que una hipotética OPA se dirija al 66% de su capital (en caso de oferta en metálico y acciones) o al 75% del capital en el caso de que la oferta sea en metálico. La compañía ha explicado la reforma a la Comisión de Valores que, sin cuestionar su legalidad, ha hecho saber a la empresa su posición contraria a limitar la negociación de acciones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 6 de marzo de 2004