Las noticias de naufragios, referidas sobre todo a navíos de guerra, comenzaron a sucederse en 1866. Pronto se descubre que el culpable es un enorme artefacto submarino construído en metal. El prestigioso oceanógrafo Aronnax, su ayudante Conseil y el arponero Ned Land terminarán siendo rescatados por la tripulación del barco submarino tras un naufragio. A bordo del Nautilus conoceran al singular capitán Nemo, hombre de talante libertario empeñado en su particular guerra contra la civilización. Julio Verne (1828-1905) se adelantó 25 años a la invención del submarino en esta trepidante novela que combina ciencia, imaginación y aventura. A. P.
- Veinte mil leguas de viaje submarino, de Julio Verne, podrá adquirirse el martes por 1 euro al comprar EL PAÍS.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 7 de marzo de 2004