Hace más de cuatro años, el consejero de Obras Públicas, José Ramón García Antón, sentenció que en dos años estaría culminada la carretera Cabanes-Oropesa. Dos años después de eso, lo que pasó fue que un juez decidió paralizar las obras, a petición del fiscal, al considerar la posibilidad de que con el proyecto, auspiciado por el presidente de la Diputación, Carlos Fabra, se incurriera en un delito contra el medio ambiente, ya que la vía invadía una parte del parque natural del Desert de Les Palmes. Hace unos meses, tras variar el proyecto, las obras se reiniciaron, no sin la oposición de vecinos y ecologistas. Ahora, la decisión está en manos del fiscal general de Castellón, Javier Arias, quien no se ha decidido todavía a parar de nuevo las obras.
MÁS INFORMACIÓN
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de marzo de 2004