El entonces consejero de Empleo de la Generalitat, Rafael Blasco, declaró en una entrevista publicada por EL PAÍS el 14 de febrero de 2000 que el acuerdo electoral alcanzado entre socialistas e Izquierda Unida tendría el mismo resultado que el efecto 2000, que tanto y tan gratuitamente atemorizó a la sociedad a finales de 1999 por su posible repercusión en los ordenadores. "El pacto PSOE-IU es un acuerdito cuyos efectos van a ser tan nimios como el efecto 2000", aseguró, y se lamentó por ello, puesto que en su opinión la sociedad española se merecía "una oposición mejor organizada, y lo que han hecho los señores [Joaquín] Almunia y [Francisco] Frutos es orquestar una ceremonia de la confusión, de dudosa rentabilidad electoral y peor contenido programático".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 11 de marzo de 2004