La masacre terrorista, con el resultado de 200 víctimas inocentes en Madrid ha sumido en la consternación a la ciudadanía. Sin distinción de ideologías, creencias, opciones políticas, edades, posición social... Ahora hace falta que los gobernantes actúen en consecuencia y, además de perseguir a los autores de los atentados, reflexionen sobre si la política "antiterrorista" que practican es la adecuada, o si no hacen nada más que favorecer las acciones terroristas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 14 de marzo de 2004