De las amenazas a los hechos. Nissan Motor Ibérica presentó ayer un expediente de regulación de empleo (ERE) que afecta a 160 empleados de su planta de la Zona Franca de Barcelona, donde trabajan otras 3.000 personas. Los afectados son 138 operarios y 22 empleados de oficinas. Nissan justifica el expediente de regulación, comunicado ayer a la Generalitat, porque estos trabajadores están "adscritos a tareas no necesarias o realizadas con más recursos de los necesarios".
El fabricante de automóviles había advertido que le sobran 600 empleados en esta fábrica si no mejoran la productividad y la competitividad y se reducen los costes de producción. El expediente de regulación de empleo se presenta cuando las negociaciones para la firma de un nuevo convenio colectivo se encuentran paralizadas. La dirección y el comité de empresa se acusan mutuamente de "falta de voluntad negociadora".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 17 de marzo de 2004