Fele Martínez volvió a los ochenta para interpretar a Enrique Goded, un director-guionista homosexual en busca desesperada de una historia. La historia llega y, como dice -citando a Truman Capote- Almodóvar en una autoentrevista: "Lo malo de las plegarias es cuando son atendidas". "Lo primero que me dijo Pedro es que Enrique no era él, así que nada de imitarle". "La mala educación es una historia sobre la pasión y el deseo llevados a punto suicida. Cada personaje se pone a prueba. Cada uno vive su pequeño infierno y el de mi personaje tiene mucho que ver con la soledad".
Fele Martínez fue el actor de la película muda de Hable con ella, el hombre menguante que se enterraba en las entrañas de su amada. "Aquello fue un juego divertido, pero ahora ha sido distinto, el trabajo con Pedro, también. Ha sido una preparación conjunta. Él te da mucha información, te cuenta muchas cosas de cómo es el personaje por dentro, luego tú buscas tu propuesta, tu manera de verlo, y así vas al rodaje. Allí, vuelve a surgir el criterio de Pedro, que sin imposiciones te lleva a su terreno, recupera su punto de vista. Y poco a poco sale el personaje".
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"En casa me amaneraba mucho para luego llegar al rodaje y no hacer nada", continúa Martínez. "Era una manera de preparar y construir el papel". Además, horas de gimnasio ("me quería seco, con definición, sin tripa") y horas de películas, libros y música de los ochenta. "Lo vi y leí todo: artículos, revistas, fancines, libros... ¡Todo!".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 19 de marzo de 2004