Los 70 hombres detenidos el pasado día 7 en el aeropuerto de Harare, en Zimbabue, bajo sospecha de ser mercenarios que se dirigían a Guinea Ecuatorial para derrocar al presidente, Teodoro Obiang, fueron procesados ayer formalmente. En la prisión de máxima seguridad de Chikurubi, un representante de la fiscalía leyó los cargos al grupo de detenidos, vestidos con uniformes de presidiarios y encadenados con grilletes y esposas. Entre los delitos se incluye el de conspiración para perpetrar un golpe de Estado con armas que intentaban comprar en Zimbabue, violación de las leyes migratorias, las relativas al armamento y a la seguridad.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de marzo de 2004