La Guardia Civil de Armilla detuvo el pasado sábado a cuatro porteros de la discoteca Dulce Beach, de Las Gabias (Granada), acusados de un presunto delito de lesiones a igual número de jóvenes malagueños, según informaron ayer fuentes del cuerpo.
Según el relato de los hechos que acompaña la denuncia, sobre las 6.30 del amanecer del pasado sábado, los cuatro porteros de la discoteca conminaron a los denunciantes a abandonar el local porque era hora de cerrar. Cuando éstos pidieron explicaciones, "comenzaron a recibir golpes sin mediar palabra alguna". Uno de los jóvenes recibió un pisotón en la rodilla que le causó lesiones calificadas de "graves" por el parte médico y los otros tres, "heridas leves".
Los agresores fueron identificados como J. F. G. G., de 37 años; D.S., de 30 años y nacionalidad lituana; S. A. L., de 26 años, y P. M. R., de 23, todos trabajadores de la mencionada sala de ocio. Tras ser identificados, los agentes del orden procedieron a su detención el mismo sábado, sobre las 22.30 y los han puesto a disposición judicial.
No es la primera vez que la Guardia Civil recibe denuncias de abuso de fuerza en la discoteca Dulce Beach, antigua Piadoli. En los últimos dos años, los agentes del orden han tramitado más de 15 acusaciones contra los porteros del local, según confirmó un portavoz del cuerpo, que indicó que sólo esta vez se procedió a la detención porque la denuncia "vino acompañada de un parte médico que certificaba la gravedad de las lesiones".
Dulce Beach abrió con ese nombre el verano pasado. Según un trabajador del local, fueron los jóvenes quienes iniciaron la trifulca, al intentar agredir a los porteros "con unos palos que sacaron del coche". La misma fuente asegura que desde que la sala cambió de nombre y de dueño, sólo ha recibido tres denuncias, incluida esta última.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de marzo de 2004