El canciller alemán, Gerhard Schröder, pidió ayer en el Bundestag (Cámara baja del Parlamento) un asiento permanente para su país en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. "Alemania está dispuesta a asumir esta responsabilidad", dijo el socialdemócrata en una declaración de Gobierno en la que también hizo un balance de lo logrado en el año transcurrido desde que anunciara el proyecto de reformas Agenda 2010.
Alemania, en muchas ocasiones, ha formulado de manera génerica su intención de entrar a formar parte del grupo de países con asiento permanente en el consejo de seguridad. Ahora, sin embargo, va en serio. La cancillería está preparando una estrategia para convencer a los demás miembros de la ONU de conceder este rango no sólo a Alemania, sino también a Japón y a otros tres países que representen a América Latina, Asia y África.
"Alemania, hoy, está bastante mejor que hace 12 meses", dijo Schröder en alusión al paquete de reformas del Estado de bienestar conocido como Agenda 2010. El canciller aseguró que en este proceso de reestructuración aún queda mucho camino por recorrer y formuló como nuevos retos aumentar las inversiones en educación e I+D. Ángela Merkel, líder de la oposición democristiana, acusó a Schröder de falta de concreción.
El canciller rindió homenaje a la historia reciente de España, una "de las experiencias que más enorgullecen a Europa". "En estos díficiles momentos, el pueblo español se merece algo mejor que escarnios por haber demostrado su madurez democrática", señaló en referencia al PP.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 26 de marzo de 2004