La presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, firmarán hoy un convenio por el que ambas instituciones se comprometen a que, a principios de 2007, haya en la capital madrileña seis nuevos intercambiadores de transporte público. El coste de las obras se cifra en 240 millones de euros, que aportarán las empresas privadas a las que más tarde se les encomendará la gestión de estas infraestructuras.
Comunidad y Ayuntamiento se unen hoy para sacar adelante un proyecto que, en parte, ya presentó el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón en septiembre del año pasado. Entonces, el regidor aseguró que edificaría cuatro nuevas multiestaciones en las plazas de Castilla, Conde de Casal y Elíptica (Fernández Ladreda) y en la estación de Príncipe Pío. También anunció entonces el alcalde una remodelación del intercambiador de Moncloa. El acuerdo al que han llegado Aguirre y Ruiz-Gallardón supone aumentar en una el número de multiestaciones previstas. La sexta se levantará en Chamartín.
Fuentes del Gobierno regional han manifestado, además, que el Ejecutivo estudia la posibilidad de cambiar de ubicación el actual intercambiador de Moncloa, porque "se ha quedado muy pequeño". Según estas fuentes, ampliar el intercambiador manteniéndolo en su ubicación actual "podría significar tener que enderezar la curva que ahora presenta la línea 3 del metro".
Los madrileños no tendrán que desembolsar ni un céntimo por la construcción de estas nuevas infraestructuras, según afirman desde el Ayuntamiento y la Comunidad. Será la iniciativa privada la que haga las obras; a cambio, las constructoras gozarán de una concesión para su explotación -cobrando un canon anual a las empresas de autobuses que tengan allí su parada- durante los años suficientes para la amortización del coste.
Ya en septiembre, sin embargo, el Ayuntamiento destinó tres millones de euros para pagar la redacción de los proyectos que presenten las constructoras. En el acuerdo que tienen previsto firmar hoy Aguirre y Ruiz-Gallardón se decidirá qué montante aporta la Comunidad. Fuentes del Ejecutivo de Aguirre afirman que la voluntad de la presidenta es que "las seis obras estén terminadas a finales de 2006 o principios de 2007 como muy tarde".
Los cuatro proyectos presentados por el Ayuntamiento suponían que en la plaza de Castilla se construyera un intercambiador de tres niveles en subterráneo y en forma de L bajo las calles de San Aquilino desde San Benito y la avenida de Asturias. En Conde de Casal se situará la terminal de transportes entre la glorieta del mismo nombre y la M-30 y bajo la avenida del Mediterráneo. Podría tener una o dos plantas, dependiendo de la decisión de Auto Res de instalar las salidas y llegadas de sus autobuses de larga distancia.
En la plaza Elíptica está proyectada una terminal para autobuses de largo y corto recorrido, así como para urbanos e interurbanos. En la estación de Príncipe Pío, dentro de su patio central, se construirá este intercambiador, que ocupará una superficie rectangular de 190 por 60 metros.
El proyecto incluirá los accesos directos en túneles desde y hacia la carretera de Extremadura y la M-30.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 7 de abril de 2004