La crisis del mercado discográfico, lejos de remitir, parece agudizarse, según la Sociedad General de Autores y Editores, que ayer presentó su memoria de actividades del año pasado. Según sus datos, se estima que en 2003 se vendieron unos 17 millones de discos piratas, lo que provocó que la industria dejara de ingresar aproximadamente 150 millones de euros. También se calcula en 200 millones los archivos descargados ilegalmente en Internet. Las ventas de discos ascendieron a 550 millones de euros, un 6% menos que la temporada anterior. El total de ejemplares vendidos apenas alcanzó los 64 millones (frente a los 71 de 2002), lo que corrobora que España vuelve a situarse por debajo del listón psicológico de los dos discos comprados por persona y año, según afirmó Eduardo Bautista, presidente del consejo de dirección de la entidad. La crisis discográfica, sin embargo, se compensa en parte con "la eclosión definitiva" del formato DVD, que creció un 16,5%.
Entre los más vendidos, Bautista señaló que la música española predomina en el repertorio, con una cuota de mercado próxima al 55%. Entre los títulos más exitosos destacan No es lo mismo (Alejandro Sanz), Lo que te conté mientras te hacías la dormida (La Oreja de Van Gogh), Eurojunior Festival (varios) y Fantasía y realidad (Álex Ubago). Los resultados de la música en vivo fueron mejores para los conciertos de música popular, que generaron 14,4 millones de euros en derechos de autor (un 10% más). La clásica tuvo que conformarse con 3,5 puntos de subida: de 1,5 a 1,55 millones.
Respecto al cine, la cuota de las producciones españolas fue del 15% (13,65% en 2002). Hubo un 16% de espectadores menos en las salas -4.186 en total-. Entre las 10 películas más taquilleras el año pasado no hay ninguna española. Los primeros puestos los ocupan las dos primeras entregas de El señor de los anillos y Harry Potter y la cámara secreta, película que fue también la más alquilada en vídeo.
En teatro y danza las nuevas piezas subieron de 1.615 nuevas piezas y 294 coreográficas en 2002 a 3.521 obras teatrales de nueva creación y 533 coreografías en 2003.
Eduardo Bautista destacó entre las buenas noticias del año pasado la paralización del borrador para una nueva Ley de Propiedad Intelectual, elaborado "sin consenso" y "de espaldas a los creadores" por el equipo saliente del Ministerio de Cultura. Sobre el programa de gobierno del PSOE, afirmó que "es claramente respetuoso, exquisito con los derechos de los creadores". "Una ley nueva sólo podrá hacerse desde el consenso", concluyó Bautista.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de abril de 2004