La Caixa celebró ayer sus primeros cien años con un acto conmemorativo presidido por el príncipe Felipe, quien elogió el papel de las cajas y de su obra social, y en especial el de la que preside Ricard Fornesa, como "precursoras del concepto de empresa socialmente responsable" y como "ejemplo de una economía social de mercado". En el mismo acto, en el que estuvo también la infanta Cristina, el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, defendió el modelo de cajas y rechazó los "intentos de politización". Fornesa lanzó un mensaje para La Caixa: "Seguir creciendo al mismo ritmo y con la misma profesionalidad".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de abril de 2004