La soprano Montserrat Caballé visitó ayer en Arganda del Rey (Madrid) el primer conservatorio del mundo que lleva su nombre, "elegido por votación popular, por los padres, madres y alumnos del centro", según explicó el alcalde de la localidad, Ginés López. "Le han dado mi nombre a muchas cosas", dijo la cantante, "pero es la primera vez que se lo dan a un conservatorio, lo que me ha sorprendido mucho".
Caballé se confesó "muy emocionada" por "este gesto tan generoso" y alabó las instalaciones, "que se merecen el beneplácito, no sólo de España, sino de toda Europa porque es un centro modélico, grande, muy bello y lleno de luz, lo que le falta a los otros". "Es un centro tan luminoso que apetece entrar y ponerse a hacer música", dijo la soprano, que recordó que "normalmente los que hacemos música la hacemos a oscuras e iluminados por los focos", bromeó.
En este conservatorio de grado medio reciben enseñanza casi 700 alumnos y cuenta con una orquesta y una banda de grados elemental y medio, un coro de grado elemental y otro del conservatorio, una orquesta profesional y una big band. La cantante se comprometió a volver a este centro "siempre que mi agenda lo permita", y la primera cita será el 8 de diciembre.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 17 de abril de 2004