Un moldavo de 21 años está en coma profundo a causa de cuatro disparos y la paliza que le propinó un grupo de entre 15 y 20 personas a las puertas de un locutorio en Orihuela (Alicante) el viernes a las 23.00. Según informaron fuentes policiales, el joven moldavo, con signos de haber bebido alcohol, hizo allí un envío de dinero a su país.
Al salir, invitó a cuatro niños de entre 8 y 12 años de etnia gitana a unos refrescos y golosinas que compró en el locutorio. Sin embargo, uno de los menores corrió hacia una calle aledaña y señaló a los padres de los niños que un "ruso" había hecho proposiciones deshonestas a uno de los menores a cambio de invitarles.
Esto hizo que entre 15 y 20 personas de etnia gitana acudieran inmediatamente con palos y apalearan al joven; uno de ellos sacó una pistola y le pegó cuatro tiros. Las investigaciones del Cuerpo Nacional de Policía están "muy avanzadas" y en varios días pueden desembocar en arrestos. Al parecer, el agredido no hizo en ningún momento proposiciones deshonestas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 18 de abril de 2004