El cardenal arzobispo de Sevilla Carlos Amigo Vallejo apostó ayer por el "apoyo y regulación civil de la familia, aunque no sea de hombre y mujer", durante un acto celebrado en Córdoba para inaugurar el nuevo centro de los Hermanos de la Cruz Blanca. Amigo Vallejo respondió así a la prensa que le preguntó sobre las repercusiones que puedan tener en la sociedad española los cambios anunciados por el nuevo Gobierno socialista, como la posibilidad de permitir matrimonios homosexuales y el que la religión no sea obligatoria en el sistema educativo.
En este sentido, el cardenal dijo que "cualquier Gobierno, de cualquier partido, tiene que estar siempre atento a aquello que pueda necesitar la sociedad" y añadió que "en este momento la sociedad española, como la de otros países, necesita sobre todo que se apoye sin condiciones a la familia, que es lo más importante".
Amigo Vallejo reconoció que "existen muchas formas de familia", y se manifestó partidario de "respetar que cada una tenga su identidad, porque hay unas convivencias de hecho que necesariamente tienen que ser reguladas de alguna manera y que haya cierta regulación civil, lo que no quiere decir que tengan que estar formadas por un hombre y una mujer".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 21 de abril de 2004