La inquietante imagen de un mapamundi en el que un gigantesco código de barras define la silueta de los cinco continentes sirve como portada para un disco contestatario y librepensador de título elocuente: Otro mundo es posible. El álbum reúne 15 grabaciones inéditas o poco conocidas de otros tanto artistas de todo el planeta que se han caracterizado por sus posturas contrarias a la globalización y al capitalismo salvaje. El navarro Tonino Carotone y el francoespañol Manu Chao abren el disco con una interpretación conjunta de La trampa, pero el resto de invitados tampoco tiene desperdicio: Emir Kusturica, Zebda, Nitin Sawhney, Massive Attack, Moby, Idir o Salif Keita también testimonian su escaso aprecio por el imperio de las multinacionales. Otro mundo es posible es una iniciativa de una organización descentralizada y sin jerarquías, Attac (Asociación para la Ayuda a los Ciudadanos), que también ha conseguido reunir para la causa a una impactante nómina de colaboradores literarios: los premios Nobel José Saramago y Shirin Ebadi, el subcomandante Marcos, Arundhati Roy, Noam Chomsky o la canadiense Naomi Klein, autora de ese No logo que se ha convertido en libro de cabecera para los antiglobalizadores de medio mundo.-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 11 de mayo de 2004