Hace poco, el señor Aznar llamó al señor Bush para manifestarle su vergüenza de que las tropas españolas se marcharan de Irak.
Supongo que ya estará marcando el mismo teléfono para comunicarle la vergüenza que le debe dar lo que las tropas de Bush hacen con los prisioneros iraquíes. Claro que es posible que comunique...-
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de mayo de 2004