Cerca de 20.000 estudiantes se pasaron desde el mediodía del sábado hasta bien entrada la madrugada del domingo por las instalaciones deportivas del Paraninfo de la Universidad Complutense, en la Ciudad Universitaria. El motivo, aclamar a las nuevas bandas de pop, rock y hip-hop nacidas en los últimos años, y algunas más veteranas, congregadas en el festival Universimad. Un acontecimiento histórico que ha recuperado la universidad como espacio para la música joven emergente, papel que había perdido en la última década.
En los años sesenta y setenta, la universidad acogió conciertos de cantautores como el legendario de Raimon, en 1969, o el Festival de los Pueblos Ibéricos, en la Autónoma, en mayo de 1976. En los ochenta, la movida madrileña arrancó de un concierto en la Escuela de Caminos en homenaje a Canito, el batería fallecido de Tos, embrión de Los Secretos, y se consolidó en otros de primavera organizados en facultades y escuelas.
Ahora, entrado el siglo XXI, la música ha vuelto al campus en un acontecimiento multitudinario llamado Universimad, por haberse organizado por el propio rectorado y el Festimad. Junto a los de la plaza Mayor, era uno de los actos principales de las fiestas de San Isidro, que terminan esta noche con la final del trofeo de Rock Villa de Madrid y la actuación estelar de Burning.
La primera tanda de ayer correspondió a los grupos raperos, llevándose el gato al agua ese singular combo llamado La Excepción Ke Konfirma La Regla. El programa especializado en hip-hop de Radio 3, El Rimadero, retransmitió su actuación en directo, como hicieron, a lo largo del día, otros programas de la cadena afines a la música que iba sonando.
Los mejores y los peores
La asociación profesional PEMOC (Periodistas Especializados en Música, Ocio y Cultura) aprovechó el mediodía del macroconcierto para entregar sus premios musicales, los primeros que otorga la crítica especializada en España. Los negativos, es decir, los que se daban a artistas como Bisbal, Bustamante, UPA Dance o Enrique Iglesias, en los diferentes apartados de peores del año, fueron los más celebrados por los estudiantes, con ostensibles carcajadas y aplausos. Ninguno de los premiados vino a recoger su galardón.
Los positivos fueron para Las golondrinas, etcétera, de Josele Santiago (mejor disco); Chucho (artista); Albert Pla (directo); On the sofa, de Sidonie (vídeo); Enrique Morente (mérito musical); La Excepción (revelación) y Bob Dylan (artista internacional).
El veterano Víctor Coyote abrió la tanda de tarde con las inspiradas canciones de su reciente disco Yo, que creo en el diablo, y le siguieron grupos como Jet-Lag, Chucho, Sôber, Mojo Project, Gecko Turner, Femme Fatal o La Fres-K.
La jornada se despidió con las actuaciones de Bebe, la cantautora revelación del momento, que presentó a lo grande su disco Telarañas pafuera, y el plato fuerte de Macaco, con su reciente obra Entre raíces y antenas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 16 de mayo de 2004